Marvin Bautista | Diario del Sur
La población en movilidad, no tienen a dónde ir y se refugia en el parque central de Tapachula, donde llegan familias enteras, pero al no tener los servicios sanitarios o de albergue, duermen, comen y hacen sus necesidades en este lugar, lo que ocasiona insalubridad, afectando a quienes por razones de trabajo permanecen en este lugar.
Las autoridades de Tapachula a quienes les corresponde el tema migratorio, deben encontrar una solución a esta problemática que ha generado atraso económico para los comercios del centro histórico y como aseadores de calzado, ya que nadie quiere acudir a este lugar de convivencia.
La actual situación se advierte que además del origen de los países de migrantes que se presentaban anteriormente, principalmente de Honduras, Haití, Venezuela, ahora hay una presencia que va en momento de familias enteras de los países del Ecuador y de Nicaragua.
Actualmente los migrantes refugiados en los albergues de la Iglesia Católica son adultos y niños en cantidades similares, en otros centros de atención y comedores que se ubican en algunas parroquias, hay mas personas que buscan el sueño americano pero que no ha podido salir de la ciudad de Tapachula.