El Juzgado Penal de la Sección Judicial de San Pedro Sula impuso la medida de la Detención Judicial al oficial de Policía Carlos Roberto Escobar Mejía en relación a cuatro delitos entre ellos el asesinato en perjuicio de Wilson Pérez un aficionado del Real España que apareció muerto en un hospital del norte con un impacto de arma de fuego disparado por la espalda de la victima.
Al mismo tiempo el Juez Penal resolvió aplicar medidas sustitutivas de la prisión a los otros 3 Imputados por el mismo caso. El subcomisario Escobar Mejía deberá guardar prisión en una base militar ubicada en El Progreso, Yoro.
El Ministerio Público por medio de la Sección de Investigación de Muertes Cometidas por Miembros de los Cuerpos de Defensa y/o Seguridad, Orden Público o Funcionarios del Estado de la FEDCV acusó al subcomisario de policía, Carlos Roberto Escobar Mejía por los delitos de asesinato, tortura, falsificación de documentos públicos y simulación de infracción inexistente.
Los otros tres agentes imputados que se defenderán en libertad, son: Luis Armando Sauceda Santos, Bayron Patricio Zelaya Gálvez y Chelssi Patricia Sandres Hernández.
Los hechos
La investigación de agentes de delitos contra la vida de la ATIC concluye que el día del hecho dos equipos de policías asignados a la extinta Fuerza Nacional Anti Maras y Pandillas (FNAMP) se dirigieron a la colonia Nueva Esperanza de San Pedro Sula e ingresaron a la vivienda donde estaba la víctima, quien al ver la presencia de las autoridades salió en veloz carrera por uno de los bordos del río Piedras, mientras los uniformados le realizaban disparos con armas de fuego donde uno de los proyectiles impactó en la espalda del aficionado cayendo sobre la acera, por lo que los policías lo subieron a la paila del vehículo tipo pick up el que se conducían, ahí lo sometieron y lo torturaron, cuando lo trasladaban al hospital Mario Catarino Rivas, donde murió.
El dictamen de autopsia determinó que la causa de muerte de Wilson Ariel, fue por una herida por arma de fuego con laceración pulmonar derecha y hemotórax derecho, en donde se logró acreditar además que el arma de fuego encontrada, fijada y levantada en la escena del crimen por la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) corresponde a una pistola, marca Girsan, serie T6368-11 G 00020, que fue hurtada por agentes de la FNAMP en fecha 16 de octubre del 2020 en operativo realizado en Quimistán, Santa Bárbara.
Sumado a ello, en las inspecciones practicadas se recolectaron dos casquillos metálicos cerca del lugar donde recibió el disparo Wilson Ariel y dos casquillos a inmediaciones donde se encontró el arma antes descrita y al ser comparadas balísticamente, el dictamen concluyó que estos casquillos fueron percutidos por el arma decomisada en 2020, desvirtuando la versión que hubo enfrentamiento o atentado en contra de la autoridad.