De manera reciente, la congresista Lizzie Fletcher nominó a la científica hondureña María Elena Bottazzi al Premio Nobel de la Paz, tras haber creado la vacuna Cobervax contra la COVID-19 y liberarla de patentes.
Bottazzi, quien es egresada de la Escuela de Microbiología de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), ha mantenido una relación muy estrecha con la Máxima Casa de Estudios, vínculo que se ha hecho más fuerte durante la pandemia mediante foros y simposios donde ha compartido con sus pares hondureños, autoridades y estudiantes el conocimiento adquirido de la enfermedad Sars-CoV-2.
La científica hondureña radicada en Estados Unidos dedicó a la UNAH la nominación a tan honroso Premio: “Tengo un mensaje para todos los Pumas de la UNAH, este es un regalo que se los doy a ustedes, a los nuevos estudiantes, a las nuevas generaciones, sí se puede, así que adelante a estudiar y a dedicarse porque Honduras tiene mucho que demostrar”, externó.
Amplió que Peter Hotez, director del Centro para el Desarrollo de Vacunas del Hospital Infantil de Texas, Estados Unidos, con quien comparte la nominación al Premio Nobel de la Paz; y su equipo están muy emocionados.
“Esto la verdad es un reflejo de la educación que he recibido en Honduras”, sintetizó Bottazzi en alusión a sus primeros conocimientos adquiridos en el campo de la microbiología en la Máxima Casa de Estudios de Honduras.
Ante la nominación, el rector de la UNAH, Francisco Herrera Alvarado, escribió en su cuenta de Twitter: “Nos sentimos orgullosos por la nominación de la Dra. María Elena Bottazzi al Premio Nobel de la Paz, reconocimiento por su extraordinaria labor en salud y contribución a la humanidad antes y durante la pandemia por COVID-19, un alto honor para nuestra amada Honduras”.