Por La República. Perú
Una vez que el presidente ruso, Vladímir Putin, reconoció el lunes por la noche la independencia de los territorios separatistas prorrusos de Donetsk y Lugansk, dos regiones situadas al este de Ucrania, una serie de rechazos de importantes potencias comenzaron a llegar en el momento más tenso de esta crisis que por ahora no avizora una pronta salida diplomática.
El presidente Emmanuel Macron, que había intentado mediar con Putin y el mandatario ucraniano, Volodímir Zelensky, una pronta desescalada de tensiones, reclamó “sanciones europeas selectivas” contra Moscú, según un comunicado oficial del Elíseo.
En esa misma línea, el primer ministro británico, Boris Johnson, calificó la acción del Kremlin como “una violación flagrante de la soberanía” de Ucrania y que es “claramente contrario al derecho internacional”. Asimismo, anunció “importantes sanciones” contra Moscú.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, anunció sanciones contra las regiones separatistas de Ucrania, y advirtió que más medidas punitivas se realizarán si es que son necesarias.
A la crítica y el rechazo también se sumó el canciller de Alemania, Olaf Scholz, quien agregó que “harán todo lo que esté a su alcance para evitar una mayor escalada de la situación”.