La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que el número de casos infantiles de hepatitis aguda grave se elevó este martes a 348 a nivel mundial y del total de menores que enfermaron, hubo 26 que necesitaron trasplantes de hígado. Mientras, otros 13 casos están siendo investigados.
El brote de este tipo de hepatitis infantil se identificó por primera vez el cinco de abril de 2022, en Reino Unido, y desde entonces los casos se han expandido a 21 países, principalmente de Europa. En América Latina ya se reportan en Argentina, Panamá y Costa Rica. En este último país vecino ya hay dos casos, identificados en una niña de dos años y otra de cuatro.
“La información epidemiológica, de laboratorio y clínica de que se dispone sobre este evento sigue siendo limitada. Hasta el momento no se ha identificado ningún agente etiológico”, asegura la OMS en un comunicado.
Por su parte, la doctora Philippa Easterbrook, del programa mundial de la OMS sobre la hepatitis, explicó en conferencia de prensa, que se han producido avances importantes en las investigaciones y que las “hipótesis principales siguen siendo aquellas que involucran un adenovirus, pero también hay una consideración importante sobre el papel de la covid-19, ya sea como una coinfección o como una infección pasada”.
Hasta el momento, solo 15 de los 21 países han notificado cinco casos o menos, señalan las autoridades sanitarias. “En esta etapa, el mejor uso de los recursos es centrarse en la investigación de alta calidad de los casos para los que se ha recopilado amplia información clínica, epidemiológica, ambiental y de laboratorio y para los que se han descartado otras causas”, señala la OMS.
Según explica la OMS, la relación entre los casos de hepatitis y la covid-19 no es concluyente. Lo seguro es que no existen vínculos entre las vacunas anticovid, pues la mayoría de infantes que enfermaron no habían recibido ninguna dosis. Asimismo, confirman que en muy pocos casos se identificó casos activos del SAR-CoV-2.
En Honduras, las autoridades de salud pública no han alertado a la población sobre este brote de hepatitis aguda grave. los epidemiólogos dicen que cuando el paciente llegue con caso de hepatitis y no se pueda diagnosticar el tipo de virus, si es A,B,C,DE, y tenga sus pruebas hepáticas muy elevadas se debe sospechar como un caso probable.