Una asociación de oficiales militares activos y en retiro denominados defensores de la Institucionalidad, Independencia y Dignidad de Honduras se pronunció por medio de un comunicado sobre la situación actual de las Fuerzas Armadas y lo que podría ocurrir si la Institución cae en manos de los políticos de turno.
1) Nosotros, oficiales en activo, celebramos que un grupo de oficiales retirados de alto rango hayan publicado un documento para expresar preocupaciones respecto a la situación de las FFAA. Aunque estamos obligados a reconocer que ellos carecen de información y por ello no valoran la peligrosidad que enfrenta nuestra institución, pues al fin y al cabo, nosotros los activos, sí sufrimos los irrespetos a la Ley y sentimos los daños que provoca la penetración de fuerzas extranjeras en nuestras FFAA.
2) Ratificamos lo dicho en pronunciamientos anteriores sobre el proceso de penetración e instrumentalización de las FFAA, en las que, debido a nuestra denuncia, ha obligado al señor Manuel Zelaya Rosales a hacer a un lado al enlace original, el expresidiario Marcelo Chimirri, como puede observarse en la página 34 de la edición #41 del semanario Poder Popular, fechado el 27 de febrero de los corrientes, donde ya no se le ve participando directamente en reuniones de alto nivel con los oficiales superiores, en discusiones que no son de su competencia y que, por su carácter de seguridad nacional, no deben ser conocidos por este personaje.
3) La más reciente estrategia aplicada, siguiendo consejos de oficiales de seguridad de los ejércitos de Cuba y Venezuela, se está aproximando a grupos de mayores, especialmente los líderes de cada promoción; así como a algunos capitanes.
4) Los ofrecimientos para captar voluntades de oficiales subalternos, les ofrecen dinero, ascensos y otras prebendas, lo que provocará división entre los oficiales operativos y peleas entre ellos.
5) Como resultado, nosotros queremos comunicar nuestra preocupación a los diputados del Congreso Nacional, a los líderes de los partidos políticos democráticos, sobre el riesgo de que al politizar a las FFAA, se va a reducir su capacidad de respuesta, especialmente en caso de un eventual conflicto contra El Salvador, que no descartamos porque ellos sienten la obligación de recuperar la Isla Conejo.
6) Finalmente, mantenemos nuestra voz en alto, nuestro puño cerrado y nuestro pie firme, en la seguridad que el único obstáculo que tiene el gobierno para entregar nuestro país a una obediencia a Cuba, Venezuela, Rusia y China, somos nosotros, los miembros de las FFAA. No queremos incurrir en desobediencia; por tanto, pedimos a los políticos que desde el Congreso Nacional defiendan la autonomía de las FFAA y evitar que el proceso de deformación del señor Manuel Zelaya continúe.