Auto de formal procesamiento con prisión preventiva le dictan a Fiama Nazareth Lemus Banegas y Nelson Ariel Zambrano (ya guardaba prisión), acusados por la Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida (FEDCV) por suponerlos responsables del delito de asesinato en perjuicio de su propia amiga Aixa Betzey López.
Durante la audiencia inicial la Sección en Muerte de Mujeres de la FEDCV presentó suficientes elementos probatorios que vinculan la responsabilidad penal de los hechos acaecidos en la colonia 28 de marzo, sector Los Ciruelos, departamento de Francisco Morazán.
En ese contexto, el juez competente remitió a Fiama Nazareth Lemus Banegas a la Penitenciaria Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS) por el término de ley; asimismo señaló audiencia preliminar para el 29 de abril a las 9:30 de la mañana.
Conforme a las diligencias de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) el día del crimen la joven fue citada por los sospechosos en un centro comercial, tras recibir varias llamadas telefónicas se trasladó a un lugar donde la obligaron abordar un vehículo, posteriormente fue asesinada con arma de fuego. Consumado el crimen, los sospechosos huyeron con dirección a la vivienda de la imputada ubicada en la aldea de Zambrano en Francisco Morazán.
Del mismo modo, las investigaciones determinan que Nelson Ariel y Jonathan Gabriel Canales Flores (fallecido), habrían conspirado en confabulación con Fiama Nazareth para cometer el crimen, motivados por una disputa sentimental entre la expareja de la imputada con la víctima.
Según el Código Penal de Honduras, el delito de asesinato se castiga con penas de 20 a 30 años de prisión, y puede aumentar a 30 años o incluso a cadena perpetua si concurren circunstancias agravantes, como la alevosía, el ensañamiento o la premeditación.
En el caso de Fiama, acusada de participar en el asesinato de Aixa, las autoridades podrían considerar agravantes como la premeditación y la participación en grupo, lo que podría llevar a una condena más severa.
Además, si se determina que el crimen fue motivado por razones de género, podría tipificarse como femicidio, delito que conlleva penas de 30 a 40 años de prisión.