“Me ha entristecido mucho lo ocurrido hace unos días en el Centro Penitenciario Femenino de Támara, en Honduras. Una terrible violencia entre bandas rivales sembró la muerte y el sufrimiento. Rezo por las fallecidas, rezo por sus familias. Que la Virgen de Suyapa, Madre de Honduras, ayude a los corazones a abrirse a la reconciliación y a dar espacio a la convivencia fraterna, incluso dentro de las cárceles” ha dicho el Papa, al finalizar el rezo del Ángelus y elevar una oración por este país centroamericano, azotado por la violencia en las cárceles y fuera de ellas.
Un enfrentamiento entre pandillas rivales provocó la muerte de más de cincuenta mujeres en un violento incidente en la Penitenciaria Nacional Femenina de Adaptación Social en Honduras.