Nueva York. La esposa del presidente Juan Orlando Hernández, Ana García de Hernández inició este martes su agenda por Nueva York con un encuentro con el director de la Oficina de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ante las Naciones Unidas, Ashraf El Nour.
La primera dama, mediante una presentación, mostró a El Nour imágenes de sus recientes visitas, junto a integrantes de la Fuerza de Tarea de Atención al Migrante, a las fronteras sur de los Estados Unidos y de México, donde corroboraron que los albergues y los centros de procesamiento están desbordados de migrantes de diferentes nacionalidades incluidos hondureños y que ahí se vive un drama humano.
“Los flujos han incrementado en los últimos meses convirtiéndose en una nueva crisis humanitaria, al igual que el movimiento irregular de haitianos y cubanos transitando por suelo hondureño”, destacó García de Hernández.
Según datos oficiales sobre las aprehensiones en la frontera sur de los EEUU al cierre del año fiscal, van 216.857 migrantes hondureños asegurados, de los cuales han retornado al país 39.417 desde EEUU y México, y más de 5,600 son niños niñas y adolescentes que permanecen en custodia.
Ana García de Hernández dijo que es importante ver las causas estructurales e históricas de la migración, como la búsqueda de mejorar económicamente ya sea por falta de empleo u otras razones; en segundo lugar, la reunificación familiar, sumada a los golpes que dejaron las tormentas Eta y Iota y a la inseguridad.
“Honduras ya realiza acciones para atender estas causas en pilares como desarrollo económico, bienestar social, respuesta al cambio climático y gestión integral del ciclo migratorio”, sostuvo.
Añadió que es de gran importancia aceptar que existen circunstancias externas que causan un efecto imán, como la falsa percepción de la política migratoria del Gobierno estadounidense, de que supuestamente las fronteras están abiertas.
El Nour reconoció el liderazgo de la primera dama en la coordinación de la Fuerza de Tarea de Atención al Migrante, no solo viéndolo desde el punto de vista de Honduras sino incluyendo a nivel regional todos los países de Centroamérica y México.