El Gobierno del presidente Juan Orlando Hernández, a través de la Fuerza de Tarea de Atención al Migrante, inició el Plan de Contingencia para Retornos No Coordinados en el punto fronterizo de Corinto, municipio de Omoa (Cortés), donde en una primera jornada se atendieron de una manera digna y segura a alrededor de 200 compatriotas procedentes de Guatemala.
Los hondureños fueron retornados desde Estados Unidos y después de viajar por México en autobús llegaron de madrugada a Corinto, luego de que fueron dejados en el lado guatemalteco a cientos de metros del punto fronterizo, por lo que tuvieron que caminar hasta dicho lugar.
Para atender a los compatriotas se amplió el servicio en Corinto con un horario extendido de 6:00 de la tarde a las 5:00 de la mañana.
Retorno asistido
Luego de ingresar a territorio de Honduras, el proceso de retorno asistido que reciben los migrantes es hacer un control sanitario para detectar altas temperaturas o cualquier otro síntoma relacionado a la covid-19; luego se les brinda comida caliente, agua y café, y a aquellos que deseen llamada telefónica o energía para sus celulares también se les facilita.
A los menores de edad se les brinda una merienda diferenciada.
Brindan atención a los migrantes retornados representantes de instituciones estatales como la Secretaría de Relaciones Exteriores, Secretaría de Salud, Instituto Nacional de Migración, Conadeh, la Dirección Nacional de Intervención Social, la Policía de Frontera, la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia, la Secretaría en los Despachos de Gestión de Riesgo y Contingencias (Copeco) y Cruz Roja Hondureña.
Como parte de este acompañamiento, los compatriotas también reciben terapia sicológica y consulta médica, esto mediante instituciones como Médicos Sin Fronteras, Médicos del Mundo, Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y Cruz Roja Hondureña.
Después de recibir esta asistencia al ingresar al territorio nacional, los hondureños son clasificados, en hombres, mujeres y familias, para ser trasladados en bus al Centro de Atención al Migrante Retornado de Omoa y el centro Belén de San Pedro Sula. En dichos puntos realizan el ingreso migratorio al país, reciben hospedaje, utensilios de primera necesidad y transporte hasta sus lugares de origen.